¡Contestame!
Y volviste,
hijo de mis células anarquistas,
a plantar rocas bien gordas en mi hermoso trayecto.
Y volviste,
hijo del traidor expatriado,
a probar mis límites sumando desafíos impensados.
Y volviste,
hijo del resentido,
a bombardear mi humor y nublar mi cielo siempre soleado.
Entraron y te desalojaron.
Entraron y te empujaron.
Entraron y te exiliaron.
¿O seguís en algún rincón agazapado?
¿O seguís en alguna cañería escondido?
¿O seguís empeñado en hacer tuyo lo mío?
¿Te vas a dar lpmqtp
alguna vez por vencido?
Comentarios
Publicar un comentario