¡Contestame!

Y volviste, hijo de mis células anarquistas, a plantar rocas bien gordas en mi hermoso trayecto. Y volviste, hijo del traidor expatriado, a probar mis límites sumando desafíos impensados. Y volviste, hijo del resentido, a bombardear mi humor y nublar mi cielo siempre soleado. Entraron y te desalojaron. Entraron y te empujaron. Entraron y te exiliaron. ¿O seguís en algún rincón agazapado? ¿O seguís en alguna cañería escondido? ¿O seguís empeñado en hacer tuyo lo mío? ¿Te vas a dar lpmqtp alguna vez por vencido?

Comentarios

Entradas más populares de este blog

LA HORA SAGRADA (Capítulo 1- Un Cuarto Propio)

LA HORA SAGRADA (Capítulo 1: Un Cuarto Propio - Semana 1)