Abrir y Ventilar
Abrir y ventilar. Para que entre el sol y salga el polvo gris de las preocupaciones que se fueron acumulando a lo largo de la semana. Las pelusas pesadas de lo que no podemos resolver. Las virutas que quedaron de eso que tanto nos desveló, pero al final, pudimos. Abrir y ventilar. Para sacudir las almohadas así los sueños toman vuelo, se enredan en el jazmín, se trepan al limonero y se mezclan con las nubes seducidos por el colibrí que los llena de electricidad y energía para, ¿por qué no?, volverse realidad. Abrir y ventilar. Para ahuyentar los miedos que se esconden en el rincón de la mesa de luz que te recuerda que la estás peleando, que cada mes es un mes mas lleno de ratitos que hay que exprimir y saborear lento, pausado, obligando al reloj a bajar su tick tock. Porque vos sos quien marca el paso. Nadie más que vos. Abrir y ventilar. Para que se filtren sin permiso rayos de ideas llenas de rimas y de ritmo, trinos de palabras que cantan canciones nuevas llenas de nota...